Y es que aquí está la clave. Aunque algunos aspectos de la apariencia de un suceso puedan llevarnos a engaño, éstos son también una manifestación inevitable de su correcta interpretación. Es decir, haciendo uso de las observaciones que a primera vista pueden llevar a equívoco, pero fijándose mejor, uno puede llegar a la respuesta correcta.
Con el asunto de la Tierra plana pasa lo mismo. Uno puede, sólo mirando a su alrededor, interpretar que es así, pero hay ciertos detalles que apuntarán a su redondez. Hace un tiempo, RC (aka G de Galleta) escribió una entrada preguntando a los lectores si conocían formas en las que se pudiera saber que la Tierra es redonda, sin recurrir a las fotografías tomadas desde el espacio. Yo recordaba unas cuantas, pero pensando un poco más se me ocurrieron otras en el momento. Bastaba con pensar "¿Qué efectos tiene que la Tierra sea redonda?" y darles la vuelta para, observándolos, poder deducir este hecho. De modo que le dejé un comentario con mis respuestas:
Busca un lugar donde cierto día del año, la luz del Sol llegue a iluminar el centro de un pozo vertical. Luego, desplázate unos 300 km alsurnorte y busca algún edificio o estructura vertical (por ejemplo, un templo con buenas columnas y sin techo). El mismo día del año en que el Sol ilumina el fondo del pozo en el otro lugar, haz aquí una medida de la sombra de las columnas, que comprobarás que no es vertical, indicando una curvatura. No sólo verás que la Tierra es redonda sino que podrás calcular su radio. Esto lo hizo Eratóstenes en el siglo III a.C.
Coge un barco y recorre los océanos viajando siempre al Oeste hasta que llegues al lugar de partida. Magallanes, siglo XVI.
Piensa en las regiones climáticas y observa que el Sol está siempre más alto en las zonas ecuatoriales que en las de mayor latitud. Esto indica una curvatura de la superficie en la cual el "suelo" en los polos está casi tangente a los rayos de Sol, mientras que en el ecuador es casi perpendicular. Además, observa las distintas zonas horarias y cómo al desplazarte hacia el Oeste una gran distancia, el Sol sale y se pone cada vez más tarde respecto a tu lugar de origen. Esto indica que el horizonte de los lugares más occidentales está más cercano al Sol a esa hora que en el lugar donde procedías, si mantienes tu reloj sin ajustar al huso horario. Esto indica una curvatura igual a la anterior Norte-Sur, pero ahora de Este a Oeste. Juntando las dos, la conclusión es que la Tierra es esférica o aproximadamente esférica.
Si dispones de tecnología actual, una determinada noche llama por teléfono o habla por internet con alguien que viva a unos cuantos husos horarios de distancia pero que aún sea de noche, y pídele que anote las constelaciones que hay en el cielo en ese momento, y haz tú lo mismo. O bien, a qué altura sobre el horizonte se encuentra la Luna, y tú lo mismo. Comparando las medidas, se observará que la esfera celeste aparece "rotada" respecto de un punto y otro de la superficie. Los horizontes en cada uno de los lugares tienen distinta inclinación.
No sé, podría seguir diciendo :P
Al poco de mandarlo me acordé de otra, pero decidí guardármela por si alguien más se animaba a contestar. Un tiempo después, RC publicó otra entrada recopilando algunos de los métodos que se propusieron, y viendo que nadie había aludido a ella, la dejé caer:
¿Sabes? Esa última forma que no llegué a explicar tiene MUCHO que ver con la última entrada de mi blog, en realidad. [Me refería a Eclipse]
Se trata de observar los eclipses de Luna desde la Tierra :D
En ellos, se ve que la sombra proyectada por la Tierra es redonda, y SIEMPRE redonda, aunque en cada uno la Luna caiga a una altura diferente sobre el horizonte. Si la Tierra fuese, por ejemplo, un disco plano, su sombra en la Luna cuando tiene lugar uno de estos espectáculos sería ovalada muchas veces, pero esto no es así ;)
Y el caso es que hay muchas más formas de comprobar este hecho. Con otras creencias pasa lo mismo. Sólo basta con fijarse bien en el mundo que hay alrededor, no confiar siempre en las respuestas del "sentido común", preguntarse por qué son así las cosas, y utilizar el método científico para descubrir las respuestas.